Creo, bueno, no creo, estoy seguro que a todos los que nos gusta o nos atrevemos por 1a vez a algún reto fuera de lo normal como un triatlón extremo, un ultratriatlón o cualquier evento de ultradistancia y lo contamos a alguien que no conoce este mundo recibimos este comentario en automático acompañado de una mirada inquisidora, casi como si estuvieses contando un plan terrorista.
La verdad es que que esto para mi ya se volvió un estilo de vida que me apasiona y que disfruto durante todo el proceso, desde que decido enfrentar el reto, el entrenamiento que prácticamente no ha parado en años, el vivir y disfrutar la competencia y cruzar la meta para automáticamente poner la mira en el siguiente objetivo.
A veces bromeo con que algún evento es el último que hago antes de retirarme del deporte y dedicarme a comer y beber con singular alegría, pero, honestamente nunca podría hacerlo, cuando paso mas de un dia sin hacer algo de actividad física de cualquier tipo, siento como mi cuerpo y mi mente comienzan a desconectarse y empiezo a fallar en otros ámbitos, así que es casi como una droga que me permite funcionar.
Me siento afortunado porque cada vez es más la gente que se acerca a mi y me cuenta como le he servido de fuente de inspiración para hacer algo diferente en su vida. Si bien siempre busco generar algún cambio positivo en los que me rodean, es particularmente satisfactorio el recibir comentarios de gente totalmente desconocida que como yo están llenos de responsabilidades, tienen familia, trabajo de tiempo completo, proyectos, actividades mas allá del deporte y aún asi logran hacer tiempo para llevarse al límite.
En unos dias estaré por 4a ocasión en la linea de arranque de un triatlón de ultradistancia, el UltraMX515 mi predilecto por llevarse a cabo en mi propio país y organizado por gente llena de pasión y compromiso que se nota en cada detalle. Además de un ejercito de voluntarios aún mas grandes que hacen que este evento tenga un toque particular de cariño que nunca he visto en ningún otro evento de cualquier tipo en el mundo.
Creo que soy la persona mas afortunada del mundo porque he podido hacer de esta pasión mi estilo de vida y rodearme de gente que me apoya aunque nunca he sido y quizás nunca seré un gran atleta. La mayoría sabe que esto para mi es un proyecto de vida que apenas comienza y que aunque quizás los resultados son aun lejanos y están llenos de riesgos tan amplios como el tiempo, siguen confiando en cada paso que doy, en cada logro y cada fracaso.
Mi crew, mi gigantesco equipo lo es todo, es en serio que sin ellos no podría. Me acompañan en la carrera, me respaldan en el trabajo mientras estoy en la competencia, dejan a punto mi bici, cuidan mi alimentacion….ok no, eso no, pero fuera de eso siempre me recuerdan que no le doy, que estoy pal´perro y que si no le chingo voy a valer madres. ¡Rodearse de gente asi de sincera, nadie lo tiene!
Llegó el momento de enfocarme, nuevamente en cruzar esa meta dejando todo el corazón, el sudor y las piernas y regresar con una buena anécdota que contarles.
ULTRAMX515 comienza ya.
Miguel Angel Garcia 